El alojamiento web puede parecer un producto básico en nuestros días. Eliges la cantidad de espacio en disco y el ancho de banda que necesitas, y ya está en marcha y funcionando. Mientras que antes había todo tipo de limitaciones, hoy en día hay infinitas opciones y los costos de alojamiento han llegado a ser casi insignificantes para la mayoría de las empresas.
Pero pensar que el alojamiento web es un producto básico como la electricidad o el gas es un gran error. El hecho es que el alojamiento web tiene una gran cantidad de partes móviles, y todas ellos deben trabajar en armonía para ofrecer una calidad alta, y un servicio ininterrumpido. La elección de un host de bajo costo puede parecer una elección racional, pero en realidad podría ser una errónea decisión debido a los daños que puede causar a tu negocio.