Cada vez que visitamos una página web, el navegador busca mediante una solicitud al servidor todos los medios que conforman la página. Desde el nacimiento de internet esto se ha hecho a través de HTTP/1.1.
Con el paso del tiempo y la evolución de la tecnología, los sitios web se han convertido cada vez en algo más complejo y pesado, y el protocolo HTTP/1.1 ha sido sometido cada vez más a mayor presión, con una gran cantidad de soluciones necesarias para hacer frente a los problemas de rendimiento.
Las páginas Web, tal como las conocemos hoy en día, a menudo se completan con recursos tales como imágenes, texto, tipografías, etc., que las hacen mucho más pesadas ??que las de la década de 1990 o incluso los años 2000. En consecuencia, se necesita más tiempo para que se carguen, lo que ha llevado a los diseñadores y desarrolladores web ha crear soluciones ingeniosas para minimizar el problema. Aún así, es evidente que hay una necesidad de realizar una actualización del mismo protocolo HTTP.