Una aplicación web que no puede ser usada con facilidad no es accesible, así, para conseguir que el contenido e información necesaria de ser consumida por los usuarios, esté accesible, implica un análisis de uso, espectativas y objetivos de cada proyecto. Una vez realizado este análisis, sólo es cuestión de colocar la información a mostrar en su lugar adecuado.
Cuando un usuario busca una información, necesita encontrarla de una forma rápida e intuitiva, sino, su percepción de la aplicación empeorará así como su predisposición al hábito en su utilización periódica.
Una aplicación accesible consigue unos ratios de uso, satisfacción y ventas mucho mayores, así como una disminución de costes en formación y detección de problemas.
La efectividad en una aplicación web, se consigue cuando los usuarios de esta tienen la opción de hacer lo que necesitan o quieren hacer.